El YOGA es una actividad física y mental que nace en la India
hace miles de años, y que con el paso del tiempo y su expansión por el mundo,
ha evolucionado en formas distintas de practicarlo, teniendo siempre en común
que es una disciplina que se basa en la búsqueda de la tranquilidad y paz
interior generando energía positiva tanto al interior como al exterior de los
que la practican.
Siempre escuche acerca de esta disciplina, pero en realidad
no me llamaba la atención cuando estaba más pequeña, tal vez lo veía como algo
aburrido o sin sentido; pero fue hasta hace unos años que al darme cuenta del
gran problema de insomnio que tenía, quise buscar una actividad que me ayudara
no solo a relajarme físicamente sino también de relajación mental, así fue que di
con mis primeras clases Hatha Yoga, una bellísima forma de meditación en
movimiento que no solo resultó en mi pérdida de peso y mejora física, sino que
mi insomnio estaba desapareciendo, algo con lo que había luchado por años en mi
vida y pude encontrar la única manera de lograr dormir una noche completa de
7hrs, ¡era maravilloso! me sentía llena de vida y solo 1hr al día estaba
cambiándome todo, esa es la parte más rica y excepcional del yoga ya que se
manejan energías positivas durante el tiempo que se practica y esas energías
nos permiten fluir en el día a día llenos de paz interior y muchas ganas de
sonreírle a la vida y darle gracias por lo que estamos viviendo.
La meditación es una forma de relajar nuestra mente para
encontrarnos con nosotros mismos y que en realidad puede resultar muy difícil
para la mayoría de las personas, pero que al hacer yoga, vamos abriendo esa
brecha poco a poco ya que interactuamos con nuestro cuerpo y lo empezamos a
conocer, existen ya muchísimas ramas del yoga, cada una muy distinta de la otra
pero con los mismos principios y finalidad, y podemos buscar la que más se
adapte a nosotros para darle a nuestro cuerpo y nuestra mente el trato que
realmente se merecen.
Desde hace algunos meses, en la Pirámide del Pensamiento
Positivo, se están llevando a cabo meditaciones en Luna Llena, esto porque nos
podemos cargar doblemente de energías positivas ya que en los días de
plenilunio se abren puertas a otras dimensiones que nos permiten, si así lo
deseamos, elevar nuestra actividad espiritual, y que combinado con los miles de
pensamientos positivos que están concentrados en La Pirámide, resulta en una
meditación plena de energías colectivas que nos ayudarán a sentirnos mejor como
personas, es por eso que los invitamos a que nos acompañen este mes de
noviembre a recargar nuestros espíritus y nuestras mentes en un lugar con un
encanto excepcional.
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